Traje nuevo, casco pintado y ritmo de vuelta competitivo.
Con estas premisas se planteaba la tercera carrera de karts de mi hermano.
En los entrenos libres se puede ver que va a estar en el meollo de la carrera.
En los cronometrados domina la sesión y solo al verse frenado por otro piloto, pierde la pole en la última vuelta.
Salida impecable desde la primera fila, coge la primera posición y parece que va a ser un paseo triunfal (o al menos eso creía yo), pero desde la cuarta posición, el piloto más joven de la categoría (7 años) empieza a remontar adelantando a los demás coches en la larga meta de recta, como si llevara un cohete.
Así después del tercer paso por meta, mi hermano es superado por el cohete, pero en la parte de curvas lo sigue sin problemas y en la siguiente curva de entrada a meta lo adelante y se pone primero, se distancia pero el cohete vuelve a superarlo al final de la recta.
Llega de nuevo la curva de entrada a meta, mi hermano entra a toda pastilla, empieza a acelerar, el primero parece que se ha quedado parado, y mi hermano ha salido volando por los aires.
Uno está acostumbrado a ver accidentes por la tele, pero ver a un niño de 10 años que es tu hermano, volando con el kart también descontrolado, te deja paralizado, esperando que todos los que venían por detrás no le dieran un porrazo. Por suerte cayó en la hierba y el kart no le golpeó.
Unos minutos de incertidumbre al verlo tendido en el suelo, hasta que mi otro hermano que se coló en el circuito y llegó en un momento hasta allí y nos dio con el dedo pulgar hacia arriba.
Ambulancia y al hospital por precaución, unas radiografías y de vuelta al circuito, que no se quería quedar sin correr la segunda manga.
En la segunda manga hizo una gran remontada, salió el séptimo y en la última vuelta iba en tercera posición pegado al segundo, que para asegurar el segundo puesto hizo una vuelta muy lenta, cosa que hizo que el cuarto los pillara en una de las últimas curvas y se metiera a lo loco en ella echando a mi hermano de la trazada. Así que acabó sexto con un cabreo impresionante.
En fin, que el susto sirva como experiencia. Era la primera carrera en la que iba a estar metido en el grupo y yo me esperaba algún incidente como el de la segunda manga, pero no un vuelo como el de la primera.
31 may 2004
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